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martes, 28 de abril de 2020

DESCUBRIMIENTO
Nunca pensé que este confinamiento me descubriera tantas cosas...Al principio, pensé que me agobiaría mucho sin contacto social y sin salir, pero no fue así, y me adapté. Luego, mi imaginación voló y viví el peor de los escenarios posible, y sufrí, pero también pasó y con el transcurrir de los días, aprendí a vivir el presente, eso que antes no conseguía, se instaló en mi vida, y, cuando despertaba, solo pensaba en las horas siguientes. Descubrí que podía hacer las tareas con tranquilidad, que el día estaba lleno de horas disponibles, que podía hacer cosas que antes ni me planteaba, que podía darme el capricho de preguntarme que me apetecía hacer. Descubrí que el mundo no está ahí afuera, está en nosotros, en nuestra actitud, en nuestra curiosidad, en nuestras ganas de seguir aprendiendo de cada experiencia. No extrañé las compras, el cine, el teatro, los bares, ni los museos…extraño a las personas que quiero, añoro los abrazos, los besos y esas miradas cómplices. Descubrí la importancia de cada minuto de vida y la cantidad de accesorios inútiles que usamos para tapar lo verdaderamente esencial. Aprendí que, pasará lo que pasará, seguiría descubriéndome y descubriendo la Vida.
Elena I. Fernández Ortiz

martes, 14 de abril de 2020

LA GRAN OPORTUNIDAD.

Llevamos más de un mes recluido en nuestras casas, nuestras relaciones sociales se limitan a mensajes, llamadas y videoconferencias. El contacto piel con piel solo puede darse con aquellos con los que compartimos nuestro hogar. Todo se ha vuelto aséptico, en las ocasiones que salimos mantenemos la distancia,tenemos cuidado para no tocar nada y ,apenas, cruzamos unas frases con las personas con las que coincidimos. Me pregunto como cambiaran las relaciones a partir de esta experiencia, nos adaptamos a casi todo, y no me gustaría que nos adaptasemos a este tipo de relación. Deseo que todo esto sirva para valorar mucho más las relaciones, los abrazos, las caricias y los besos que son el alimento del alma.
Yo soy,de las que piensan, que en toda crisis hay una oportunidad. La oportunidad de valorar todo lo que teníamos, poder visitar a amigos y  familia, abrazar a los que queremos, viajar y conocer lugares y,sobre todo, compartir. Es la oportunidad de descubrirnos, de explorar facetas nuestras que no conocíamos, de conocer nuestros miedos, de darle espacio a los sentimientos que están emergiendo y de aceptarlos porque forman parte de nosotros. Vamos a hacer que todo esto merezca la pena, vamos a evolucionar como personas y como sociedad. Vamos a dejar lo superficial, lo circunstancial, lo ornamental y seamos más auténticos. Vamos a mirar a los ojos a nuestros semejantes, sabiendo que tiene los mismos miedos y sueños que tú, y, así desde la empatía y el amor será posible crear una sociedad más “humana” y solidaria. Esa, es la gran oportunidad.

Elena I. Fernández.